agosto 07, 2007

Juan 1


Juan 1, 1-18

1 En el principio era el Verbo, y el Verbo estaba en Dios y el Verbo era Dios.
2 Él estaba en el principio en Dios.
3 Todas las cosas fueron hechas por Él, y sin Él nada se hizo de cuanto existe.
4 En Él era la vida, y la vida era la luz de los hombres.
5 Y la luz brilla en las tinieblas, pero las tinieblas no comprendieron.

6 Hubo un hombre, enviado por Dios: se llamaba Juan.
7 Éste vino como testigo, para dar testimonio de la luz, para que por él todos creyesen.
8 No era él la luz, sino quien debía dar testimonio de la luz.
9 Era la luz verdadera, que ilumina a todo hombre que viene a este mundo.
10 El verbo estaba en el mundo y el mundo fue hecho por Él, pero el mundo no le conoció.
11 Vino a su casa y los suyos no le recibieron
12 Mas a cuantos le recibieron dioles poder de hacerse hijos de Dios, a los que creen en su nombre; 13 no nació de sangre, ni de deseo de carne, ni de deseo de hombre, sino que nació de Dios.
14 Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros; y contemplamos su gloria, gloria que recibe del Padre como Hijo único, lleno de gracia y de verdad.

15 Juan da testimonio de él y clama: «Este era del que yo dije: el que viene detrás de mí se ha puesto delante de mí, porque existía antes que yo».
16 Pues de su plenitud nosotros todos recibimos, y gracia sobre gracia.
17 Por que la Ley fue dada por medio de Moisés; la gracia y la verdad ha venido por Jesucristo.
18 A Dios nadie le ha visto jamás: el Hijo único, que está en el seno del Padre nos lo ha dado a conocer.

comentarios:

Anónimo dijo...

εν αρχη ην ο λογος και ο λογος ην προς τον θεον και θεος ην ο λογος